Andalucía se prepara para la llegada de la segunda ola de calor del año

No hace ni dos semanas que Andalucía sufrió la primera ola de calor del año y ya se prepara para la llegada de la segunda. Expertos en Meteorología advierten que los diferentes modelos con los que trabajan apuntan a un aumento de las temperaturas en los próximos días y la posibilidad de batir nuevos récords.

En concreto, el modelo del Centro Europeo señala una situación propicia para que la próxima semana se produzca un significativo aumento de las temperaturas que, previsiblemente, disparará los termómetros hasta los 45 grados, o incluso algún grado más en algunas localidades españolas, según apuntan desde Meteored.

La Agencia Española de Meteorología (Aemet) también habla ya de una probable ola de calor durante varios días en áreas del interior de Andalucía a partir del próximo domingo o lunes. "Habrá que ir concretando los valores máximos esperados de temperatura. Hay discrepancia todavía entre la versión determinista y probabilística", apuntaba la Aemet este martes en Twitter.

Este lunes ya se rozaron los 40 grados de máxima en diferentes localidades andaluzas como El Granado (Huelva) con 39,9 ºC (grados); Montoro, (Córdoba), 39,8 ºC; Córdoba (aeropuerto), 39,7 ºC o Andújar (Jaén) 39,5 ºC.

"El mes de julio ha comenzado por todo lo alto en lo que a temperaturas se refiere en el sur peninsular", señala José Miguel Viñas, meteorólogo de Meteored. "Según nos vayamos acercando a mediados del mes de julio, lo normal, si atendemos a la climatología, es que el calor se intensifique, iniciándose la canícula. Este periodo no tiene fechas fijas, aunque la tradición popular suele situarlo entre el 15 de julio y el 15 de agosto".

La predicción más allá de una semana es arriesgada, ya que la incertidumbre aumenta a medida que se estira el horizonte de predicción. No obstante, según indica Viñas, "las últimas salidas del modelo presentan una cierta dispersión en el alcance y la magnitud que alcanzará el episodio de altas temperaturas, parece claro que a partir del próximo fin de semana una dorsal de aire muy cálido comenzará a abrazar la mitad oriental peninsular, Baleares y Canarias".

Todo esto hace pensar a los expertos que estaríamos ante el inicio de la segunda ola de calor del año y que se podría batir un nuevo récord de temperaturas máximas a nivel nacional, que actualmente está en los 47,6 grados en La Rambla de Córdoba. En concreto, el modelo determinista del ECMWF (Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Plazo Medio) prevé una máxima de 48,2 grados en el país.

Según la misma predicción, el mercurio se mantendrá estable en los próximos días, cuando se esperan valores por debajo de los 40 grados. Será el sábado 8 cuando se espera que vuelvan a rebasar esa cifra hasta, progresivamente, quedarse muy cerca de los 47 grados.

Por otro lado, las probabilidades con las que trabaja la Aemet también advierten de máximas entre los 44 y los 46 grados en Jaén, Córdoba, Granada y Sevilla desde el lunes 10 de julio hasta el miércoles 12 de julio.

"Los pasados meses de abril y mayo la predicción estacional del Centro Europeo ya apuntaba a que tendríamos un verano muy caluroso, con una probabilidad alta de temperaturas por encima de la media, con calor extremo transitorio. De momento se está cumpliendo, especialmente en el centro-sur peninsular y, por lo que acabamos de indicar, todo apunta a que tendrá su continuidad. También es muy probable que el período estival tenga precipitaciones por encima de la media, debido principalmente a las tormentas", comenta José Miguel Viñas.

Qué es una ola de calor

No todos los episodios de calor se clasifican como ola de calor. Reciben esta denominación cuando cumplen con los siguientes factores:

• Las temperaturas superan el 5% del máximo registrado en los meses de julio y agosto en estaciones meteorológicas representativas de la región.
• Tiene una duración mínima de 3 días.
• El 10% de las estaciones meteorológicas registran temperaturas máximas por encima del percentil del 95% para los meses de julio y agosto.

España ha estado batiendo récords en los últimos años. El verano pasado fue el más caluroso desde 1981. Y por otro lado, la pasada primavera ha sido la más seca de la serie histórica.