La Guardia Civil interviene 1.500 kilos de hachís tras una persecución en Palomares del Río

La Guardia Civil intervino la noche del martes un cargamento de hachís tras una persecución con una furgoneta en Palomares del Río. Los agentes detectaron la llegada de una embarcación semirrígida por el río Guadalquivir, que introdujo una serie de fardos de hachís y descargó el alijo en la zona de Coria. Los narcotraficantes guardaron los paquetes en una furgoneta.

Los guardias dieron el alto al vehículo, que se dio a la fuga. Comenzó entonces una arriesgada persecución que terminó unos kilómetros más adelante, en el término municipal de Palomares del Río. Una persona fue detenida. En la furgoneta había 50 fardos de hachís, lo que supone un peso aproximado de unos 1.500 kilos de esta droga.

El instituto armado ha iniciado una investigación para tratar de localizar la procedencia y el destino del hachís, así como para averiguar a qué organización pertenece el cargamento. Este es el primer gran alijo del año en la provincia de Sevilla, donde se confirma el papel del río Guadalquivir como una de las principales vías de entrada en Europa de la droga procedente del norte de África.

La pasada Nochevieja, la Guardia Civil asestó uno de los golpes más duros al narco en los últimos años, cuando detuvo al Lanas, uno de los narcotraficantes más buscados de Sevilla, que llevaba fugado desde el año 2018. Este hombre de 32 años es el jefe de uno de los clanes más activos de la provincia, que domina tanto la entrada de narcolanchas por el río como la distribución de los estupefacientes por la comarca del Aljarafe.