Las ordenanzas fiscales salen adelante con el voto de las ediles no adscritas

El Pleno del Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra ha dado luz verde a la aprobación inicial de la modificación de ordenanzas fiscales para 2018, con los votos a favor del equipo de gobierno socialista y dos concejales no adscritas (de C's y Alcalá Puede), los votos en contra de PP, IU y Alcalá Puede y las abstenciones de PA y Ciudadanos, según informó el gobierno local en un comunicado.

La propuesta es la disminución del tipo del IBI urbano hasta el 0,520%. Esta rebaja fiscal, unida a la actualización de los valores catastrales para 2018, supondrá una rebaja media en el recibo del IBI de 21 euros para el próximo año y, según insistió el gobierno local, situará a Alcalá de Guadaíra como uno de los municipios de la provincia con un tipo más reducido de este impuesto en comparación con el fijado en otras localidades. Así en Alcalá el tipo estará fijado en el 0,520%, mientras que la media de la provincia de Sevilla se sitúa en 0,562%.

El gobierno destacó además que se han incluido otras medidas que agilizan y simplifican los trámites para solicitar aplazamientos y fraccionamiento de pago de los impuestos municipales gestionados por el Ayuntamiento. En concreto, se amplían plazos como los de solicitud de bonificaciones a familias numerosas y se mejoran los criterios de aplicación de determinados beneficios fiscales, como los referidos a los de vehículos adaptados de personas con movilidad reducida.

Igualmente, se declaran exentas de tasa de ocupación de vía pública las campañas informativas de entidades sociales, se reducen de 30 a 15 euros las tasas por ocupaciones de vía pública en caso de obras de escasa incidencia, y se modifica la tasa de matrimonio civil para adecuarla al coste efectivo de los servicios que se presta el Ayuntamiento fuera de jornada laboral.