"Nuestro objetivo es embotellar y comercializar el 100% de la producción"

José Espina. Presidente de la Cooperativa Vinícola de Bollullos Par del Condado

Nacida en 1955, esta cooperativa, la mayor de Andalucía dedicada al vino, celebra este año su 60 aniversario y lo hace inmersa en un proyecto de integración en otra entidad de segundo grado.

Asunción Fdez. De Castillejo

12 de mayo 2015 - 01:00

FUNDADA en 1955, la Cooperativa Vinícola del Condado está celebrando su 60 aniversario y lo hace comenzando un nuevo proyecto de integración en una cooperativa de segundo grado, Enuva que, en un futuro, -y al igual que otras cinco cooperativas vinícolas onubenses- pretende comercializar con marca propia el 100% de sus vinos. José Espino Rosado es el presidente de esta cooperativa -la mayor en lo que a vinos se refiere de Andalucía y la segunda de España- y que actualmente produce ocho millones de kilos de uva de la que sacan siete millones de litros de vino. En la cooperativa se integran 350 socios y se cultivan 800 hectáreas de viñedos.

-Coincidiendo con la celebración de este aniversario han iniciado un nuevo proyecto de integración en una cooperativa de segundo grado. ¿En qué fase está y cuáles son los objetivos a lograr?

-Efectivamente, uno de los proyectos más importantes que tenemos es integrarnos junto con cinco cooperativas más -la de Almonte, la Rociana, la de La Palma, Villalba y Manzanilla- en una nueva cooperativa de segundo grado, con el objetivo de comercializar nuestros vinos embotellados y conseguir que todo el valor añadido de nuestro producto se quede aquí, en manos de los productores. El proyecto no sólo está en marcha sino que ya tenemos incluso distribuidor para México y Panamá y contactos avanzados en el Reino Unido, Rumanía y otros países del Este. En una primera fase, la idea es comercializar el 25% de nuestros vinos -lo que son unos cinco millones de litros- y como objetivo final es acabar con la venta a granel que ahora hacemos y embotellar y comercializar el 100%. Como decía antes, el objetivo principal de este proyecto es obtener una alternativa que nos permita que el valor añadido de nuestras producciones quede en manos de los agricultores que forman parte de las cooperativas. Y no sólo eso, se trata también de abrir nuevos mercados a nivel internacional mediante gestión propia y directa de Enuva, a través de una dirección comercial profesional y exclusivamente dedicada a ello. De esta forma se pueden eludir los vaivenes del propio mercado y las exigencias de las grandes comercializadoras de vino a nivel local e internacional.

-¿Cómo se llamarán los vinos que comercialice Enuva?

-La marca será Condaluz, de Condado y andaluz. De momento se va a sacar el Condaluz blanco, pero la idea es que todos los tipos de vinos que actualmente producen cada una de las seis cooperativas se comercializarán también con marca Condaluz, de manera que habrá Condaluz tinto, Condaluz rosado -el de Rociana- Condaluz oloroso -el Misterio- y así con cada uno de ellos.

-Esta marca ¿se venderá sólo fuera de España o también a nivel nacional?

-De momento fuera, pero luego ya veremos. Por ahora vamos despacio, a ver cómo funciona, y también porque no hay suficiente dinero para invertir fuerte.

-Actualmente, ¿cuánto vende a granel la cooperativa y cuánto embotella con marca propia?

-En estos momentos sólo comercializamos con nuestras marcas el 30% del vino que producimos; el resto se vende a granel, aquí en la zona o para fuera. Por ejemplo, a Castilla-La Mancha le vendemos alrededor un millón y medio de litros y a Italia, unos dos millones de litros.

-La modernización y la inversión en I+D han sido retos que se han ido superando en los últimos años. ¿Cuáles son los resultados de estas apuestas?

-Ahora mismo contamos con un enólogo que es, en mi opinión, de los mejores de Andalucía, entre otras razones porque pone muchísima fe e ilusión en los proyectos. El resultado es que actualmente trabajamos con la última tecnología que hay en el mercado de fermentación controlada. Asimismo, de la manos del enólogos se han mejorado las técnicas de cultivo y de vendimia, con lo que la mejora de los vinos ha sido muy grande. Aparte de que hemos aumentado mucho la producción de la cooperativa al modernizar buena parte de nuestras vides y ponerlas en espalderas de tres metros. También hemos sacado nuevos vinos y productos

-De hecho, ustedes no sólo elaboran los tradicionales vinos blancos de Huelva sino también algún tinto…

-Ya hace 12 años que sacamos un tinto, Lantero, roble y crianza. Y también tenemos un tipo de moscatel carbonatado, Moscato, y ahora vamos a lanzar un vermut que se encuadrará en la gama del Misterio, junto al oloroso , el dulce y el cream. Otra novedad es un nuevo vino blanco llamado Ceceo. Además, están nuestros clásicos como es el Mioro o nuestro vino de naranja.

-¿Se distribuyen y venden bien estos vinos?

-En Andalucía se encuentran en todas las grandes superficies. Y ahora estamos también vendiendo los tintos en Nigeria y China. Pero este asunto es el que precisamente se quiere mejorar con la cooperativa de segundo grado

-¿Cuánto factura actualmente la cooperativa?

-Unos tres millones de euros. Lo cierto es que la producción aumenta cada año, pero los precios no están todo lo bien que deberían.

-En estos sesenta años, ¿se han incorporado muchos nuevos socios a la cooperativa?

-Más bien lo contrario. Cuando nació la cooperativa, mediados los cincuenta, había más de 800 socios y ahora somos sólo 350. Muchos se fueron muriendo y la gente joven no quería quedarse en el campo. Se iban a la construcción y a otros negocios donde ganaban más. Ahora, con la crisis de la construcción, algunos están volviendo.

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