Nuevo curso, nuevos retos

Arranca la segunda temporada completa de Diego Pablo Simeone al frente del banquillo del Atlético de Madrid. Después de una campaña 2012-2013 en la que el argentino contribuyó a que tanto los jugadores como la afición volvieran a disfrutar con la magia del fútbol y los resultados, la plantilla afronta un nuevo curso, mucho más duro.

La dificultad, en este caso, viene asociada a nuevos y atractivos retos. El principal, el que colma de ilusiones a los hinchas y a los artífices de sus dichas y desilusiones, es el retorno a la Champions tres años después. Ya ha llovido desde aquel curso 2009-2010, cuando se produjo su última incursión europea -bastante breve, por cierto, pues el Atleti no pasó de la fase de grupos-. Esta vez, los de Simeone esperan alargar su periplo continental, aunque la empresa requiera de un gran esfuerzo conjunto.

Los colchoneros tendrán por delante intensas semanas en las que conjugar la exigencia de la Champions con la regularidad propia de la Liga. Por no hablar de la Copa del Rey, ese torneo que algunos se empeñan en empequeñercer, pero que colmó de alegrías al Atleti el pasado 18 de mayo. Y si no que se lo pregunten al eterno rival. El Real Madrid vio como, contra todo pronóstico, los rojiblancos se hicieron con la victoria y con el décimo trofeo, para más inri, en territorio merengue. Y es que hacía 14 años que desde que el Atleti se anotara su última victoria en un derbi madrileño.

sin balón

Cuando pierde el esférico, las dudas hacen acto de presencia en la zaga. Son instantes de nervios y de rechaces, de confiarlo todo a la reacción de los defensas y, sobre todo, a las paradas de Thibaut Courtois. Las manos del 13 belga resultaron fundamentales la pasada campaña, minimizando en no pocas ocasiones los errores defensivos. El joven internacional, de casi dos metros de altura, asegura responder muy bien a la presión.

con balón

El Atlético no perdona en el contragolpe, una acción en la que los medios Koke Resurrección y Arda Turán hacen gala de su buen entendimiento. A esto hay que sumar los oportunos desmarques de Diego Costa, que acaba de renovar hasta 2018.

lo mejor

Las incorporaciones del mercado veraniego, entre ellas la del defensa argentino Demichelis y la del joven brasileño Baptistao, han insuflado buenas sensaciones a los atléticos. A ellos se suma David Villa, deseoso de aprovechar la oportunidad que le brinda el conjunto blanquirrojo para que se reconcilie con la portería rival.

lo peor

La plantilla aún tiene que resolver un gran interrogante: cuánto echará de menos a Radamel Falcao. Si en 2011 el colombiano aterrizó en Madrid para hacer olvidar al Kun Agüero, en esta ocasión no está nada claro si Adrián, Villa, Baptistao y Costa podrán sumar galones y anotar, al menos, los mismos goles que el ya delantero del Mónaco.