Triana afronta en diciembre el cambio circulatorio por el cierre de San Jacinto

El cierre al tráfico de San Jacinto decidido por el Ayuntamiento de Sevilla y que cambiará por completo la movilidad por todo el barrio de Triana y parte de Los Remedios se aplicará a partir del próximo mes de diciembre, según había esbozado en octubre pasado la Delegación de Movilidad que gestiona el socialista Francisco Fernández. El corte total y definitivo al tráfico de San Jacinto entre Pagés del Corro y el Altozano obligará al cambio de sentido de ocho calles de Triana para distribuir todo el tráfico que antes canalizaba esta vía hacia Chapina y la Plaza de Cuba, así como a una reorganización de las líneas de Tussam que dan servicio al barrio, y que sufrirán variaciones en sus itinerarios e incluso la desaparición de una de ellas.

A una semana justa del 1 de diciembre, no sólo los vecinos y comerciantes reclaman una información más precisa que la que aportan un puñado de planos colgados en los tablones de anuncio del Mercado de Triana por Movilidad; también el propio distrito Triana reclama una comunicación directa para coordinar la aplicación de los nuevos planes de tráfico y la dirección de Tussam, que exige la comunicación de la fecha del cierre al tráfico con al menos 10 días de antelación para informar a los usuarios, formar a los conductores sobre los nuevos itinerarios, hacer las pruebas previas y trasladar las marquesinas a los nuevos emplazamientos.

Nada de ello se ha hecho todavía, pese a la intención de Movilidad de aplicar el nuevo plan de tráfico en la zona antes de la campaña de Navidad, posiblemente tras el puente de la Constitución y de la Inmaculada. Los 53.000 residentes en Triana y los 11.000 vehículos que a diario circulan por San Jacinto deberán cambiar de hábitos de aquí a quince días para absorber el modelo circulatorio implantado por el Consistorio.

Ocho calles cambiarán de sentido: San Vicente de Paúl (que tendrá sentido ascendente en dirección a Chapina), Clara de Jesús Montero (que quedará con un único sentido hacia Chapina), Castilla (que invertirá su sentido y será mano en dirección al Altozano), Manuel Arellano (que será de bajada desde Chapina a la Ronda de Triana), Antillano Campos, Génova, Paraíso y un tramo de Pagés del Corro (el que media entre República Argentina y la Plaza Virgen de la Milagrosa).

La circulación interior del barrio será canalizada a partir de entonces hacia los puentes del Cachorro -que acusa el paso de 60.000 vehículos al día- y el de San Telmo. El Puente de Triana quedará con un carril por sentido tras la obra del carril bici, actualmente en ejecución, por lo que se reservará para transporte público y residentes, mayoritariamente.

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