Seis detenidos por intentar robar coches en el parking del aeropuerto

El CSIF critica la desprotección del nuevo aparcamiento de la terminal, en el que sólo hay un vigilante porque los demás "son utilizados para realizar otros servicios".

Fernando Pérez Ávila / Sevilla

28 de junio 2012 - 14:11

El sindicato CSIF advirtió este jueves del intento de robo de coches ocurrido el miércoles en el aeropuerto de San Pablo ante la "desprotección" del aparcamiento de la terminal. Tanto la central en Sevilla como los representantes de la misma en el comité de empresa de Trablisa -la empresa de vigilancia que tiene encargada la seguridad en el aeropuerto- criticaron la "injustificada" reducción de vigilantes de seguridad en el aeródromo de San Pablo, cuando "hasta la fecha actual se siguen realizando horas extras".

En una nota de prensa, el sindicato señaló que una banda compuesta por seis ciudadanos rumanos fue sorprendida el miércoles robando varios coches por "el único vigilante" que está destinado a cubrir dicho servicio en el aeropuerto sevillano. El vigilante alertó de la presencia de los sospechosos en el parking a la Policía Nacional, que finalmente los detuvo. Los arrestados son seis delincuentes especializados en el robo de vehículos de alta gama y tenían en vigor varias órdenes de búsqueda y captura. Los hechos ocurrieron en el nuevo aparcamiento inaugurado recientemente.

Según indica la nota de CSIF-Sevilla, esta zona del aeropuerto está "desprotegida", ya que "los vigilantes son utilizados por la empresa Trablisa y por el ente público Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) para cubrir otros servicios, dejando abandonada la custodia de los vehículos".

Además, el sindicato apunta que "ya se redujo un indicativo por parte de la empresa en esta zona". Este patrullero realizaba las rondas del perímetro "por ser una zona crítica por un posible atentado como ya sucedió en varios aeropuertos de España, como por ejemplo el de la T-4 de Madrid", recuerda el CSIF, en referencia al atentado de ETA en la terminal del aeropuerto de Barajas en el que una furgoneta bomba hizo explosión el 30 de diciembre de 2006, un hecho que costó la vida a dos personas de nacionalidad ecuatoriana que no pudieron ser desalojadas a tiempo del parking.

Por su parte, fuentes de AENA señalaron a Europa Press que "la seguridad del aeropuerto está plenamente garantizada" y detallaron que el incidente se produjo en un recinto de la empresa Aparcamientos Urbanos de Sevilla Sociedad Anónima (Aussa), que no es competencia de los vigilantes del aeropuerto y, en todo caso, su vigilancia compete a las Fuerzas de Seguridad del Estado.

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