La hora de Joaquín

Nadie en el Betis se pronuncia abiertamente sobre un posible regreso de Joaquín, pero esta opción sigue abierta. De hecho, ayer en Italia se aseguraba que el portuense está a la espera de una reunión con la Fiorentina, con la que le queda un año de contrato, para decidir su futuro. Según estas informaciones, Joaquín aguarda una propuesta de renovación por parte del club italiano o bien que se le facilite su salida del club con el destino claro de regresar a Heliópolis a coste cero, lo que provocaría que el club verdiblanco pudiera asumir tanto su ficha como ofrecerle varios años de contrato.

La llegada de Paulo Sousa, nuevo entrenador del equipo viola, no ha disminuido la importancia del portuense en la Fiorentina. De hecho, Joaquín está siendo uno de los jugadores más destacados en esta pretemporada, en la que ha participado con asiduidad con goles y asistencias decisivas. Precisamente, el pasado miércoles, tras el amistoso que el equipo italiano disputó ante el Chelsea, dejó abierta la posibilidad a una salida, lo que ha aumentado los rumores sobre este asunto. "El contacto sigue siendo el mismo. El Betis está en una situación de buscar un conjunto o un bloque para mantenerse en Primera e intentar ser un gran equipo. Mi situación sigue siendo la misma, me queda un año de contrato y no sé si continuaré o me iré", manifestó Joaquín, lo que fue entendido en Italia como toda una declaración de intenciones.

El Betis, mientras tanto, no ha movido ficha en los últimos tiempos. La alta ficha del portuense y el hecho de que la Fiorentina pudiera solicitar un traspaso se han señalado como obstáculos para su vuelta, aunque nadie esconde en Heliópolis que su llegada sería la guinda para el retorno a Primera. Además, las excelentes relaciones del gaditano con Eduardo Maciá, que fue el que apostó por su fichaje en la Fiorentina, sería otro punto a favor para el regreso del hijo pródigo.

Ante este panorama y con los medios italianos alimentando la opción de que Joaquín recale en el Betis, su agente, Eduardo Espejo, en declaraciones a Radio Bruno Toscana, quiso rebajar la tensión sobre este asunto. "La última intención de Joaquín sería la de asustar a los tifossi, con los que tiene una excelente relación. Todavía no hemos hablado con la Fiorentina, quedan todavía muchos días por delante para el cierre del mercado. El club y el jugador tienen que expresar su opinión cuando nos volvamos a reunir. Cualquier cosa puede suceder. Debe ser el club el que llame al jugador y no a la inversa", afirmó Eduardo Espejo, que sigue manejando con tino los tiempos de una negociación.

Joaquín lo tiene claro y sabe que este verano tiene la oportunidad de firmar su último gran contrato, aunque su vinculación con la Fiorentina finalice el próximo año. Su deseo sería el de regresar a Heliópolis, un asunto que no es sencillo, tanto por su situación personal como por la entidad viola, de ahí que presione con una posible renovación como fórmula para aclarar de una vez su futuro.