Una reválida para Igiebor

Desde la primera reunión de los técnicos antes de comenzar los entrenamientos, Pepe Mel dejó claro que esta temporada debía convertirse en la de la consolidación de Nosa Igiebor, a quien colocó en los papeles como el recambio de Beñat, al entender que Verdú se desenvuelve en una posición más adelantada. Un mes después de comenzar la pretemporada, esta idea del entrenador se ha consolidado en los ensayos, donde Igiebor siempre aparece como acompañante de Verdú y, en los últimos días, con Matilla de pivote defensivo, a la espera de que la dirección deportiva cierre a ese escudero de los mediocampistas ofensivos.

Igiebor llegó en buenas condiciones a Jerez, pese a que fue operado a finales del mes de mayo de su problema de pubis, y desde el principio se ha mostrado con mayor confianza en su juego que en el inicio de la pasada temporada, cuando su tardía llegada y los problemas de adaptación provocaron que no encontrase el sitio en el equipo hasta casi el final de la Liga.

Hasta el momento, el nigeriano viene cumpliendo con las dos funciones principales que Mel le ha solicitado desde el inicio de los entrenamientos. Para empezar, el técnico pretende que Igiebor comience a elaborar el juego de ataque verdiblanco, aprovechando su capacidad para aguantar la pelota y asociarse con Verdú, que jugaría por delante suya. Eso sí, Mel le ha insistido para que el juego del centrocampista nigeriano sea más vertical y profundo y no tanto los pases en horizontal. La segunda tarea pasa por la responsabilidad defensiva que debe asumir Igiebor en esta temporada, por lo que Mel lo ha mentalizado en el rigor táctico necesario para ayudar en la recuperación del balón.

El propio Igiebor también se marca esta temporada como la de su reválida en el Betis. Con la confianza del técnico y de sus compañeros, el nigeriano conoce que ya no le valen las excusas y que será examinado con lupa desde el principio, de ahí que se haya mostrado siempre receptivo a las pautas de Mel.

Desde hoy con el amistoso ante el Fulham hasta el próximo fin de semana, cuando el Betis cierre su gira en Inglaterra ante el Hull City y el Everton, Igiebor deberá demostrarle a Mel que no se ha equivocado en su planteamiento de colocarlo como sustituto de Beñat en la elaboración del juego, por más que las cualidades del nigeriano y del vasco no sean idénticas.

Igiebor, que ha despertado la atención en Inglaterra hasta el momento, tiene otro aliciente para esta temporada. Y es que tras ganar la Copa de África el pasado mes de enero -en la que comenzó de titular pero fue perdiendo su sitio en el once-, el centrocampista pretende regresar al combinado africano para disputar el Mundial de Brasil, el gran acontecimiento del fútbol en este año. Stephen Keshi, seleccionado nigeriano, ya le ha comunicado que entra en sus planes siempre y cuando el centrocampista se gane un sitio en el Betis, de ahí su máxima implicación desde que comenzó el trabajo verdiblanco.

La gran preocupación de Mel se sigue manteniendo en el escudero del propio Igiebor y de Verdú. Carlos García y ahora Matilla vienen ocupando esa posición, aunque el técnico continúa esperando la llegada de otro mediocentro defensivo mientras Lorenzo Reyes continúa recuperándose del esguince de rodilla que sufrió en Montecastillo.

La dirección deportiva viene barriendo el mercado europeo a la búsqueda de ese centrocampista que complete la plantilla, pero las primeras opciones de los técnicos se han ido escapando por diversos motivos. Pina, que fue firmado por el Villarreal, Digard, que acabó renovando su contrato con el Niza, o Krychowiak e Iborra, al que el Reims y el Levante no facilitan su salida en este verano, han ido cayéndose de la lista de la dirección deportiva, a la que también se le han ido otras opciones que se habían negociado con sigilo.

La lesión de Reyes ha obligado a que los técnicos aceleren las gestiones para conseguir un mediocentro, pero el club sólo realizará una incorporación cuando se esté plenamente convencido de que la llegada subiría el nivel de la plantilla. De este modo, la dirección deportiva mantiene varios frentes abiertos, a la vez que se cuenta con un plan B en el que entrarían jugadores como Alou Diarra, Kvist o Bodmer, que han sido colocados encima de la mesa, pero cuyos emolumentos son muy elevados.

Con este panorama, Mel continúa trabajando en Inglaterra para afinar la maquinaria de su equipo de cara al estreno liguero en el Santiago Bernabéu, donde Nosa Igiebor comenzará su reválida de esta temporada.