Vuelta de tuerca a los planes de ajuste para salvar la repesca

El PP facilita la aprobación al PSOE en Coria · En Mairena del Alcor el crédito ha salido ahora por unanimidad · Osuna y Olivares reducen más los gastos en personal

Trinidad Perdiguero

16 de junio 2012 - 05:01

La mayoría de los ayuntamientos de Sevilla que han podido acogerse al plazo adicional dado por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas para aprobar o rehacer planes de ajuste vinculados a los créditos para pagar a proveedores no han dejado pasar la oportunidad. Coria del Río y Mairena del Alcor -donde el problema se debió a la falta de mayoría de los alcaldes en el Pleno- salvaron el trámite ayer, con una coincidencia de voto entre PP y el PSOE, impensable hace unas semanas. Revela las negociaciones -incluso a nivel provincial- que se han producido para evitar que la alternativa de la retención del 50% de la PIE (la Participación de Ingresos del Estado y principal fuente de financiación local) empeore la asfixia municipal.

En Mairena del Alcor hubo unanimidad. IU, socio del gobierno con el PA y el PP pero que bloqueó en un Pleno anterior la operación financiera, ha apoyado ahora el crédito. Se cierran así las negociaciones que, a raíz de ello, inició con el PSOE de cara a la moción de censura. IU ha consultado a sus bases y concluido que hay margen para ejecutar los programas que pactó al entrar en el gobierno con el popular Ricardo Sánchez. Lo sorprendente es que el PSOE -con la ausencia de dos ediles- también respaldara la operación por 2,1 millones, al contrario de lo que hizo unas semanas, como IU.

En Coria, los tres ediles del PP se abstuvieron, permitiendo que saliera un plan que habían negociado con el alcalde socialista José Vicente Franco, que habló de "acuerdo de Estado". El PP votó a favor de la operación financiera, que precisa mayoría absoluta. El PSOE renunció a sus pretensiones de incluir, entre otras cosas, rebajas por encima del 40% del sueldo del personal laboral. Los recortes, rondarán finalmente el 10% y los impuestos subirán un 6%.

Valencina, Osuna, El Coronil, Olivares y Almensilla, algunos pueblos que aprobaron planes de ajuste pero fueron rechazados por insuficientes, también han aprobado cambios. En la mayoría, suponen recortes más severos en gastos en personal y corrientes para equilibrar las cuentas. En Osuna, el gobierno local socialista afirma que Hacienda les ha "obligado" a recoger una reducción del 10% en personal y que se plasmará en eliminación de horas extras y gratificaciones, no se sustituirán bajas o jubilaciones y se suspenderá la productividad. Los sueldos de los políticos bajarán un 5%. Es necesario gastar dos millones menos al año y para ello, junto a otras medidas, dejará de funcionar temporalmente la piscina cubierta.

Isidoro Ramos, alcalde socialista de Olivares, admite que han tenido que ajustar mucho más para equilibrar las cuentas en un año. A los ochos despidos de mayo se unirán seis contratos que no se renovarán en junio y otros dos en agosto. Hasta diciembre podrían llegar a ser diez. Y habrá que negociar con los trabajadores recortes en las ayudas de los convenios colectivos para llegar al ahorro de 500.000 euros previsto para 2013. Se aumentará la inspección de impuestos.

En Valencina, el Pleno fue el miércoles y, según fuentes del gobierno local, los cambios se han centrado en subidas de tasas e impuestos, aunque el IBI y el Impuesto de Vehículos no se tocarán. En El Coronil, el interventor que ha llegado en este intervalo y que había elaborado planes en otros municipios ha centrado los cambios en la estructura o temporización de los ajustes, según el alcalde, Jerónimo Guerrero (PSOE), que, como curiosidad de cómo se han hecho las cosas con el plan de proveedores, apunta que los responsables de la oficina de La Caixa de la zona, a los que les tocó el crédito que debe suscribir el municipio, fueron los que le anunciaron, antes de que Hacienda lo hiciera, que iba a haber 15 días más para hacer esos cambios, que lo habían pedido. En Almensilla, los cambios fueron aprobados por el gobierno de IU -aunque los dos ediles críticos votaron en contra- , el PSOE y el PP y hablan de cambios técnicos y mayor esfuerzo en la contención del gasto que puede provocar problemas de liquidez.

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