El pianista Juan Pérez Floristán debuta en la temporada de la ROSS

Ha interpretado El carnaval de los animales de Saint-Saëns en los conciertos para escolares de la Sinfónica de Sevilla (ROSS) y, recientemente, acompañó al tenor sevillano Juan Sancho en su recital en la sala Manuel García. Pero será hoy cuando el pianista Juan Pérez Floristán (Sevilla, 1993) debute al fin en el escenario principal del Teatro de la Maestranza -en calidad de solista del undécimo programa de abono de la ROSS y bajo la batuta del maestro Marc Soustrot- con un concierto de Prokofiev que repetirá también mañana.

El currículo de este avezado alumno de las pianistas Ana Guijarro, Galina Eguiazarova y María Floristán (su madre) resulta apabullante y plasma la excelencia alcanzada por los jóvenes intérpretes sevillanos que, como sucede igualmente con el flautista Rafael Ruibérriz de Torres o el violinista Rubén Mendoza, han sumado notables logros desde antes incluso de alcanzar la mayoría de edad. Para Pérez Floristán, como es lógico, el referente más inmediato es el pianista onubense Javier Perianes: "Siempre le he admirado mucho y es un aliciente pensar que un andaluz ha conseguido llegar tan lejos".

La inusitada madurez artística de Pérez Floristán, que acaba de cumplir 18 años, tiene mucho que ver también con su padre, el director orquestal Juan Luis Pérez, muy vinculado a la ROSS. Él y su madre le inculcaron "el valor de trabajar con el piano día a día, aprender de mis errores, aprovechar el tiempo y no centrarme en cuestiones que no tienen nada que ver con la música". Esa "base sólida" es algo que han destacado sus sucesivos profesores, como la pianista Elisabeth Leonskaja, con la que se perfeccionó en Lübeck (Alemania) y que le presentó a Paloma O' Shea, la directora de la Escuela Superior de Música Reina Sofía de Madrid, tras animarle a ampliar su carrera fuera de Sevilla. "Hice las pruebas y me admitieron. Y Leonskaja me recomendó encarecidamente estudiar con Galina Eguiazarova. En todo ello, sin duda, acertó", recuerda.

En Madrid, donde ahora reside la mayor parte del tiempo, no cesa de ofrecer conciertos. En diciembre de 2009 ya actuó en el Teatro Monumental de la capital junto a la Sinfónica de Radio Televisión Española, dirigido por Adrian Leaper, y en los últimos meses ha ofrecido distintos recitales en la Fundación Juan March. Pero sigue muy vinculado a Andalucía, donde obtuvo el primer premio en el disputado Concurso de Piano de El Ejido y le reclama la Orquesta de Córdoba, con la que debutó como solista e irá de gira antes de fin de año por Extremadura. Con todo, él rechaza que se le catalogue como niño prodigio. "Aunque tenga cierta facilidad, me ha costado sudor y lágrimas llegar hasta aquí. Lo de niño prodigio es un cliché que no hace bien a nadie. He estudiado como el que más", asevera.

Pérez Floristán agradece la intensa formación camerística que recibe en el Reina Sofía, "una de las señas de identidad de esta escuela". Bartok, Brahms y Ravel se cuentan entre sus compositores favoritos aunque en este programa de abono interpretará el Concierto para piano y orquesta nº 1 de Prokofiev. "Es un concierto corto, lucido y brillante. Resulta muy fresco y juvenil. Al público le apasiona", explica antes de señalar que siente "como una gran oportunidad" el actuar bajo la batuta del maestro Marc Soustrot, muy apreciado por los músicos de la ROSS.

En los próximos meses, Juan tiene ante sí una apretada agenda que incluye el Festival Rafael Orozco de Córdoba. Orozco, el pianista que ofreció el 2 de mayo de 1991 el programa inaugural del Teatro Maestranza, efeméride de la que se cumplen 20 años, es uno de sus artistas predilectos, "como Alicia de Larrocha, Leonskaja y Daniel Barenboim, él tanto en su faceta de pianista como de director".