Chirigóticas y su homenaje al ama de casa abren la oferta teatral del Quintero

Hace ya algunos años, las integrantes de la chirigota callejera de Las Niñas se encargaron de inaugurar la propuesta escénica del Teatro José Monleón, en la localidad madrileña de Leganés. El espectáculo, que entusiasmó al público y la crítica, se llamaba Chirigóticas y trasladaba la "irreverencia, la libertad, el humor y el contacto con el público" de la tradición gaditana del carnaval ilegal al escenario de un teatro. Lo explica Ana López, actriz, letrista y alma mater de esta compañía de teatro musical que completan Teresa Quintero y Alejandra López. Hoy, y tras más de 200 funciones por toda España y cinco meses de temporada en Madrid, el encargo de amadrinar un nuevo espacio les llega de parte de Jesús Quintero. Con esta compañía, el popular comunicador inaugura la oferta escénica de su teatro, ubicado en la calle Cuna, en el recinto del antiguo Cine Pathé, un lugar que, dice, quiere convertir en un "centro de agitación cultural" en el que tengan cabida todo tipo de espectáculos así como servir de centro de formación comunicativa.

Como si de un programa de televisión con sello de la casa se tratara, la rueda de prensa transcurrió entre anécdotas y recuerdos de las protagonistas de la compañía y hondas -pausadas, irónicas y punzantes- reflexiones de un Jesús Quintero que sienta con esta obra las claves de la oferta de la próxima temporada.

El segundo montaje de Chirigóticas, La maleta de los nervios, es una comedia coral ambientada en Cádiz, "mitad musical, mitad teatro" , y que rinde "homenaje al ama de casa", define Antonio Álamo, director y dramaturgo de los montajes de las gaditanas. A partir de las letras originales de Ana López, incluidas en el repertorio La malita de los nervios, Álamo ha introducido los conceptos de personaje y acción dramática en el universo chirigotero de esta formación ilegal, esto es, aquella que no participa en el concurso oficial del Teatro Falla y, por tanto, no se atiene a normas. Los habituales del Carnaval gaditano conocen de sobra su repertorio. Precisamente su experiencia de años recorriendo las calles de Cádiz en tiempos de don Carnal les lleva a tener "sobrado contacto con el público", apunta Álamo, que valora este perfil como un valor añadido a la hora de que su humor sea entendido de norte a Ssur. Las letras de Ana López son , define Álamo, "escatológicas, procaces y sexuales". Un tono que se traslada a La maleta de los nervios, obra en la que Álamo ha hecho una labor de dramaturgia "alucinante, porque ha mantenido la frescura de la calle en un espacio acotado como es un teatro", señala Teresa Quintero. Ha logrado, dice, "acercar [el barrio de] La Viña al teatro".

Y, como tantas cosas que suceden en Cádiz -"la tierra en la que nació el surrealismo", apunta Quintero-, un episodio aparentemente trivial desencadena todo un filón para el humor y el ingenio. Marisa (a la que da vida Ana López) es un ama de casa obsesionada con la limpieza en cuya puerta de casa defeca a diario un perro. "Son personajes que nada más podrían estar en el sur, en Cádiz, pero universales a la vez", explica López, que añade que en esta comedia se han "permitido" alguna escena "dramática". Sin embargo, fieles al espíritu gaditano, "son gente muy positiva, que se ríe de sus miserias", apunta Alejandra López, tercera en Chirigóticas. Es, resumen las tres, "la preocupación por encontrarle la parte cachonda a la vida".

La maleta de los nervios. Teatro Quintero. Calle Cuna, 15. Funciones el 30 de abril, y el 1, 7, 8, 9, 13, 14 y 15 de mayo. Entradas a 15 euros en ServiCaixa.com; en la web www.teatroquintero.com y taquilla.