Ritos indígenas y ginecólogos para acercarse a un tema tabú

Bajo el sugerente título de Moon inside you, tres productoras -entre ellas la sevillana LZ Producciones- han investigado Un secreto demasiado bien guardado. Acaban de terminar el rodaje de un documental en el que se refleja la lucha de su directora, Diana Fabiánová, contra los dolores de la menstruación.

Durante tres años, el equipo de rodaje ha seguido a Fabiánová por todo el mundo, entrevistándose con expertos de todos los ámbitos (ginecólogos, antropólogos, psicólogos) para rechazar que la menstruación, en sí misma, tenga que ser dolorosa. "Su abuela murió de cáncer de útero", comenta el productor del documental, Jerónimo Molero, "y su madre también lo sufrió. Ella empezó a documentarse para saber si ese era el proceso natural".

En el tiempo que duró la investigación, un grupo de mujeres se atrevió a probar con sesiones experimentales de danza oriental con las que pretendían aceptar los cambios de su cuerpo, y en tan sólo tres meses el dolor menstrual paró. En las más de 200 horas de grabación, Fabiánová recorre las teorías indígenas y los ritos que existen en las diferentes culturas para aceptar este proceso.

"Queremos abrir ventanas en las cabezas de la audiencia", asegura el productor, tratando un tema que casi no ha sido abordado por el cine. Pero este no es un documental corriente. No se trata de un inventario de ritos ni de una aglomeración de testimonios. Las entrevistas con expertos se combinan con la reproducción de la vida de un óvulo en plastilina y encuestas a hombres a pie de calle -algunas de ellas en Sevilla, con resultados divertidísimos, según el equipo-.

"Tratamos las supersticiones de manera profunda, pero con mucho humor", afirma Jerónimo Molero. Se han atrevido a rodar anuncios publicitarios de un producto llamado moon flow "para acercarse a lo femenino a través de la sangre". E incluso intentan atravesar el tabú de la etiqueta menstrual, como ellos llaman a las manchas en los pantalones blancos, con pequeñas performances.

Siempre desde la perspectiva de la directora, el equipo viajó por todo el mundo buscando soluciones y remedios para el dolor menstrual. Encontraron una niña que, como si fuera el alter ego de Fabiánová, ha grabado un diario fílmico durante los dos años que han precedido a su primera regla. "Le acaba de llegar", comenta el productor, "nosotros la hemos visto crecer, hemos visto su proceso de hacerse una mujer".

La peculiar investigación de Diana Fabiánová quedará reducida a un breve documental que se exhibirá en festivales y televisiones. Con humor y muchos recursos, este equipo ha roto Un secreto demasiado bien guardado para acercarse un tema que se considera privado en casi todas las sociedades. Y, de paso, han conseguido su objetivo: liberar a la directora de sus dolores.