Cartografía del videoarte en las aulas

Mariana Hormaechea pertenece a una nueva generación de comisarios preocupados tanto por las cuestiones formales del arte como por su recepción entre los diferentes públicos desde posiciones de mediación y vocación pedagógica. Licenciada en Historia del Arte por la Universidad de Sevilla, completó estudios en la Universidades de Padua (Italia) y de Barcelona, donde obtuvo un máster en arte contemporáneo que le permitió profundizar en el conceptual, el arte electrónico, el vídeo de creación y otras manifestaciones con las que el gran público aún dista de estar familiarizado. Acortar la distancia entre las enseñanzas artísticas y el ámbito profesional es uno de los objetivos que persigue con el proyecto que coordina desde 2011, El vídeo en el aula, una plataforma de análisis y reflexión sobre la integración de las nuevas prácticas audiovisuales en el contexto educativo nacional. Once centros de enseñanza de toda España -las facultades de Bellas Artes de Cuenca, Málaga, Granada y Sevilla; la Universidad Europea de Madrid; las Escuelas de Arte de Sevilla, Córdoba, Huelva y Jerez de la Frontera, así como los IES Néstor Almendros de Sevilla y Pablo Neruda de Huelva- participan en esta edición del ciclo, que acoge hasta mañana el auditorio del Centro de Iniciativas Culturales de la Universidad de Sevilla (Cicus). Cada centro presenta su programa, su metodología de trabajo, y posteriormente realiza un pase con los trabajos más destacados que permite contrastar los discursos que se han generado. Las sesiones están abiertas al público interesado y han alcanzado el centenar de inscripciones. Además, los once programas seleccionados pueden ser disfrutados gracias a la exposición que hasta el viernes 17 acoge la sala de vídeo del Cicus.

Mariana Hormaechea ha sido coordinadora de videoarte para el festival Loop Barcelona y reconoce su querencia por los pioneros de esta disciplina, "como los míticos Nam June Paik y Bill Viola", antes de destacar el "elevado nivel" que hay en España. "Me interesan mucho los trabajos en vídeo de Juan Carlos Robles, Javier Codesal y Dionisio González, y he tenido la suerte de que colaboren en este ciclo". El comisariar a artistas emergentes, como es el caso en el Cicus, le permite "cartografiar la situación real y actual del videoarte en el ámbito educativo de nuestro país, con una atención muy específica a Andalucía".

Los profesores y artistas que han participado seleccionando los trabajos de cada centro han sido Eduardo D'Acosta (Escuela de Arte de Sevilla), Cristina Gómez Águila y Joaquín Pérez ( IES Néstor Almendros de Sevilla), Dionisio González (Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Sevilla), Neftalí Pérez (Escuela de Arte de Jerez de la Frontera), Ana García López (facultad de Bellas Artes de la Universidad de Granada), Marta Murillo (Escuela de Arte Mateo Inurria de Córdoba), Carmina Galeote y Eva Fernández (Escuela de Arte León Ortega de Huelva), Juan Carlos Robles (Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Málaga) y Antonio García, Alberto Sanz y Alfonso María Crespo en el caso del IES Pablo Neruda de Huelva. Javier Codesal, Alberto Chinchón y Enrique Corrales han seleccionado las creaciones en vídeo de la Universidad Europea de Madrid y, desde Castilla-La Mancha, Ignacio Oliva y Miguel Ángel Roque han destacado los trabajos de la Facultad de Bellas Artes de Cuenca.

La génesis de este festival que incluye ponencias, mesas redondas, contenidos y una exposición final se produjo en 2011 dentro de la Obra Social de Cajasol. Allí nació El arte en el aula, que mostró algunos de sus resultados en el festival internacional The Scientist Videoart de Ferrara. Ahora, de la mano del Cicus (Cajasol colabora aportando material audiovisual), Hormaechea confía en que "este evento se consolide como una cita anual y se le dé movilidad por los centros educativos y los festivales especializados. Es importante que se cree un punto de encuentro permanente entre el sector profesional y los alumnos", recalca.