Fernando Faces
Perspectivas económicas: España 2025
El mercado marroquí de las energías renovables se encuentra en plena mutación. Aunque de sobra es conocido que, en el país magrebí, como en palacio, las cosas marchan despacio. El Parlamento debate actualmente el proyecto de ley que deberá conducir a la nueva Ley sobre las Energías Renovables. El nuevo texto, que podría entrar en vigor dentro de un año -aunque hay quien considera los plazos demasiado optimistas-, fomentará la autoproducción en la medida en que no someterá a los centros generadores de energía solar, eólica o de biomasa a la obtención de una autorización si se mantienen por debajo del umbral de los dos megavatios.
Con el cambio legislativo, los grandes operadores, que serán los más beneficiados, podrán inyectar energía a las instalaciones de la Oficina Nacional de Electricidad (ONE) sin necesidad de gruesos trámites. La ley se enmarca en el propósito, por parte de las autoridades marroquíes, de lograr que en 2020 un 20% de la energía consumida en el país provenga de fuentes renovables, plan que supondrá una inversión de 8.000 millones de euros. El país soporta además un déficit energético decisivo: el 97,3% de la energía primaria y el 15,1% de la energía eléctrica se importan.
"Hasta que no se produzca el cambio de legislación que esperamos, realizar plantas solares fotovoltaicas no es rentable", asegura Antonio Galán, director comercial de Pryesa Ingenieros, Antonio Galán. Para Luis Miguel Carrasco, director general de Isofotón Marruecos, empresa malagueña fabricante de soluciones fotovoltaicas que ya está presente en el mercado magrebí realizando proyectos de la mano de la ONE, se prepara la privatización del sector, pero hay un factor importante que no contemplará, de momento, la ley: "La Oficina Nacional de la Electricidad no subvencionará la energía eléctrica, sino que la comprará a precio de mercado, con lo cual la rentabilización de la inversión será más lenta".
¿En qué situación se encuentran las empresas andaluzas del sector? A juzgar por las declaraciones de esta semana en el marco de Expo Andalucía Marruecos del presidente de la Asociación de Promotores y Productores de Energía Eólica de Andalucía (Aprean), Mariano Barroso, en una posición privilegiada. "Tenemos que aspirar a un 80% del mercado de las energías renovables, nos toca y debemos estar más implantados en Marruecos, por cercanía y vecindad". Las firmas de nuestra comunidad atesoran experiencia y know how necesarios. El país cuenta con unas condiciones físicas favorables para el fomento de las energías eólica y solar fundamentalmente. Por el momento, sin embargo, la presencia de empresas de nuestra comunidad es exigua.
"La dispersión de la población de Marruecos sigue la lógica de alguien que tira un puñado de garbanzos al aire", comentaba en forma de metáfora un miembro de la organización. La imagen ilustra a la perfección una de las posibilidades que tiene el mercado de las placas solares para viviendas o comunidades particulares. "Las necesidades de suministro eléctrico son grandes en el medio rural y es cierto que hay una clase media que puede permitirse estas instalaciones", afirma el responsable de Pryesa Ingenieros. Es este nicho de mercado el que interesa a Mansel Electricidad, una sociedad malagueña encargada de la comercialización de pequeños autogeneradores eólicos, que celebraba el interés por sus productos en Expo Andalucía de Casablanca, como lo hacían los de Solbisur, de la provincia de Córdoba. El buen ánimo predominó entre los stands de las empresas del sector de las renovables, como destacaban responsables de Extenda.
También te puede interesar
Lo último