La limitación del pago en efectivo afectará al 36% de las ventas de coches usados
La patronal de vendedores señala que la crisis y la falta de financiación han disparado el abono al contado
La prohibición desde ayer de realizar pagos en efectivo a partir de 2.500 euros en las operaciones en las que intervenga un profesional puede afectar al 36% de las ventas de vehículos usados, más de 600.000 unidades. Ésta es la estimación de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor (Ganvam), que calcula que el 52% de las compras de vehículos de ocasión se realiza al contado.
Según el Libro Blanco del Vehículo de Ocasión de Ganvam, la crisis y la falta de financiación han aumentado los pagos al contado en estos últimos años, hasta alcanzar ese 52%, y nueve de cada diez superan los 2.500 euros de media.
La asociación explica que en la actualidad el 40% de las compras de vehículos de segunda mano se realizan a un profesional, mientras que el 60% restante está en manos de particulares. Así, concesionarios y compraventas son responsables del 36% de estas transacciones, mientras que las empresas de rent a car tienen una presencia del 4%.
Juan Antonio Sánchez Torres, presidente de Ganvam, considera que "la nueva limitación del pago en efectivo aportará mayor transparencia al mercado de usados y frenará el fraude fiscal". Al tener que realizar los pagos superiores a 2.500 euros utilizando medios de pago diferentes al metálico, como la transferencia, el ingreso en cuenta o el cheque bancario, habrá mayor control sobre operaciones que antes quedaban fuera del alcance del fisco.
"Además de limitar el fraude fiscal, se pondrá freno a la competencia desleal de los que defraudaban, frente a una abrumadora mayoría de empresas que cumplen correctamente sus obligaciones tributarias con Hacienda", añade.
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