Una cuestión de pormenores

Las negociaciones van por buen camino y en el Cajasol han decidido que la paciencia es virtud en época de crisis, aunque los agentes no se dan por enterados y siguen pidiendo el oro y el moro. Los sevillanos, salvo la renovación de Ellis, no han incorporado a ningún jugador en las últimas semanas, aunque novedades habrá más pronto que tarde.

Hay flecos en varias operaciones que impiden que se cierren por completo. Es el caso de Xavi Rey. Hace escasos días era el Gran Canaria el principal adversario de los hispalenses. La presencia de Pedro Martínez en Las Palmas daba un plus a los isleños para contar con el pívot catalán el próximo curso. Sin embargo, ha vuelto a adelantar el Cajasol a todos sus oponentes y ahora ocupa la pole position en la puja por el joven poste. Ahora bien, toca esperar aún unos días.

La demora se debe a los planes del Barcelona. Fuentes del club azulgrana afirmaban ayer que "la cosa pinta bien para el Cajasol, pero no hay nada cerrado". Las cuentas que están haciendo Creus, responsable de la sección de baloncesto culé, y su equipo es el número de seleccionables que tendrá a su disposición Xavi Pascual.

Sada, Grimau, Navarro y Trias valen para cumplimentar el cupo de cuatro españoles en una plantilla de 11 integrantes, pero quizás haya alguna salida y ése es el principal argumento que obliga a esperar por la decisión sobre Rey. "No sé nada aún. El Barcelona no me ha comunicado si sigo o si me marcho", apuntaba ayer el protagonista, quien vendría como cedido a Sevilla, pues el Barcelona quiere quedarse con sus derechos.

Otro negocio: Calloway. Hay más bases estadounidenses en cartera, pero éste ocupa el primer lugar en las opciones del Cajasol. Juan Llaneza, que antes de ir a la liga de verano de Las Vegas ha estado en la de Orlando, tratará de cerrar el fichaje del director de juego, aunque no depende tanto de él como de la Cibona. Con el base más o menos está todo hablado, pero el equipo croata, que tenía una cláusula para renovar al jugador que no ha utilizado al salirle muy costoso la próxima temporada -como argumentó en la edición de ayer de este periódico Perasovic, técnico del conjunto balcánico-, exige un traspaso. Y en Sevilla no van a pagar por Calloway. Si se arregla el entuerto entre clubes, el base llegará a San Pablo.

Por último, Milisavljevic. Es un secreto a voces que en el Cajasol no cuentan con él, ni en la etapa de Martínez ni tampoco en la de Plaza. Desde hace tiempo, con Humet en la dirección general, se entablaron conversaciones para su desvinculación. Todavía no está cerrada, pero sí cercana y el base serbio no seguirá en Sevilla.