Esperando a Sampaoli

Cuando el sevillismo celebró en Basilea su último título una noche del pasado mes de mayo, no hace mucho, ni podía imaginar lo convulsa que se iba a tornar una pretemporada en la que, primero, fue Monchi quien amagó con una salida del club que éste abortó; segundo, se produjo la marcha del técnico que llevó al equipo a lograr tres Ligas de Europa y serían vendidas figuras clave en el equipo como Krychowiak y puede que Gameiro. Esto último, la venta de jugadores, suele ser más o menos habitual en este negocio del fútbol, pero los movimientos en los banquillos, y de esta forma, levantan más revuelo. Lo último, ante lo que la afición espera con el corazón en un puño, es la pelota que se ha ido formando en torno a la figura del técnico elegido para suplir a Emery.

Empezó siendo un rumor, un deseo... para llegar, con el paso de los días, a hacer dudar a los propios gestores de la entidad sevillista, que en la tarde de ayer decidieron coger el toro por los cuernos e ir aclarando, punto por punto, todo el volcán que está generando Jorge Sampaoli y las noticias que lo sitúan como principal candidato a dirigir la selección albiceleste. Y si al principio recibían con risas noticias que llegaban de Argentina como que compaginaría los dos trabajos, la dimensión de los comentarios, declaraciones, movimientos que llegaban desde Buenos Aires empezaron a inquietar más de la cuenta, sobre todo porque el técnico tampoco ha llegado a frenar en seco esos rumores con una declaraciones contundentes jurando y demostrando su compromiso con el Sevilla. Unas palabras de su abogado diciendo que su intención es ser seleccionador de Argentina "pero sin las consecuencias legales" que ello pueda conllevar, informaciones que apuntaban a que el Estado argentino (con un presidente eminentemente futbolero como Mauricio Macri) financiaría incluso la penalización que la AFA tendría que pagar al Sevilla... llevaron al club en la noche de ayer a dar un ultimátum a Sampaoli. Fue tras el único entrenamiento que el equipo celebró ayer en Bad Schönborn, en el que incluso se pudo ver a Sampaoli hablando por telefóno en el mismo césped en la parte final del mismo, mientras la plantilla hacía la vuelta a la calma.

En el Sevilla, con una plantilla hecha alrededor de él y bajo sus no pocas peticiones, no quieren ni pensar en un nuevo revuelo de esas dimensiones a pocos días del primer partido oficial. Con José Castro y Monchi presenciando el entrenamiento de ayer, el presidente le pidió tras el mismo que frene en seco estos rumores con una declaración pública aclarando sus intenciones de futuro, algo a lo que Sampaoli se ha comprometido a hacer hoy mismo después del amistoso ante el Mainz.

Mientras, no se sabe si para aclarar dudas o para meter presión al entrenador, el club improvisó una pequeña rueda de prensa en la que Monchi hizo hincapié en que ve a Sampaoli muy comprometido con el proyecto. Sin embargo, no aclaró si, directamente, Sampaoli ha tranquilizado al club en este aspecto. "Para el Sevilla es un orgullo que nuestro entrenador sea deseado por la selección argentina, no es una selección cualquiera, pero más allá de ahí Sampaoli tiene contrato con el Sevilla y lo que percibo es que está totalmente involucrado. No he visto ningún cambio y si algo me llama la atención es la presión que noto de él por querer mejorar la plantilla", dijo.

Monchi insistió en que el Sevilla no tiene ninguna noticia. "Lo que sabemos es a través de los medios, nadie de AFA nos ha comunicado nada, y no tenemos más noticias. Entiendo que la selección argentina es noticia de portada de todos los diarios y hay mucho revuelo, pero también leo que se reúnen con rusos, con Bielsa, que quieren hablar con Pochettino, con el Cholo (Simeone)... entiendo que una de las opciones puede ser Jorge. Él está pidiendo informes, ha visto vídeos del Mainz y piensa igual que yo, en mirar el futuro, no hay indicio para no pensar en la normalidad", recalcó.