Emery, atento a Carriço, que apunta a Málaga

Apenas faltan cinco días para que el Sevilla comience la competición liguera y todavía existen bastantes dudas en cuanto al posible once que Unai Emery pueda presentar en La Rosaleda frente al Málaga. Más allá del refuerzo para la zona ofensiva que la dirección deportiva confía en cerrar cuanto antes, la mayoría de los interrogantes se centran en la evolución de tres futbolistas importantes en el esquema del vasco y que por diversas dolencias no estuvieron en la cita de Roma. Éstos son Carriço, Krychowiak y N'Zonzi, con quienes el técnico vasco es optimista y confía en que lleguen al encuentro frente al conjunto malacitano.

Recuperar al portugués es especialmente importante para Emery, que respiraría algo más tranquilo por reforzar una de las zonas más mermadas del esquema. El luso es uno de los líderes de la zaga sevillista, máxime tras la ausencia prolongada de Nico Pareja, y así lo demuestran los más de 40 partidos que disputó la pasada temporada a las órdenes del vasco. Su polivalencia, además de su jerarquía en el eje de la zaga, son vitales para que el Sevilla recupere su fortaleza defensiva, una de las principales bazas y señas de identidad del conjunto blanquirrojo.

Carriço sufrió una rotura de grado 1 en el recto anterior del cuádriceps de la pierna derecha durante la semana previa a la cita de Tiflis, lo que evitó su participación en la derrota frente al Barcelona en la Supercopa de Europa y, evidentemente, también en el amistoso frente a la Roma el pasado viernes. Una vez recuperado, el central tratará de convencer a Emery de que se encuentra en plenas condiciones para volver a ser el jefe de la defensa sevillista.

N'Zonzi, por su parte, sigue avanzando en su recuperación. El centrocampista galo contrajo la salmonelosis días antes de la cita europea frente al Barcelona y se perdió tanto el partido de Georgia como el amistoso frente al conjunto romano, aunque prevé estar a las órdenes de Emery de cara a la semana entrante para disputar el partido inaugural de la nueva temporada. De hecho, desde hace un par de días, ya ha comenzado el trabajo físico tras la gastroenteritis severa que le produjo la bacteria.

El caso de Krychowiak es diferente al de sus otros dos compañeros. El mediocampista polaco sufrió una fisura costal en el encuentro frente al Barcelona, donde actuó de central junto a Kolodziejczak debido a las numerosas ausencias en la zaga, lo que hizo que los médicos no aconsejaran que participara en el partido del viernes frente a la Roma para estar a punto para el primer partido en La Rosaleda.

Así las cosas, el vasco espera recuperar a estos efectivos de cara a la jornada inaugural. La entrada de Carriço daría un plus de competitivadad a la defensa y permitiría a Emery colocar a Krychowiak en el medio del campo, su posición natural, junto a Banega o Krohn-Dehli.