La semana del lateral
El Sevilla se fija como objetivo el brasileño del Girondins Mariano tras alejarse momentáneamente de la órbita de Isla. Immobile, que viajó junto a Monchi, se sumó este lunes a la concentración del equipo en Murcia.
Unai Emery continúa recibiendo las piezas de su puzle y era en la noche de este lunes Ciro Immobile, acompañado por Monchi, el que atravesaba las puertas giratorias de un hotel que el italiano bien conoce, pues lo visitó este año con el Borussia Dortmund. En un vuelo hasta el aeropuerto de San Javier, el sustituto de Carlos Bacca llegó a La Manga pasada la medianoche y hoy estará ya a las órdenes de los preparadores físicos en la sesión matinal de gimnasio que precederá a la específica de fútbol por la tarde.
Con la llegada de Immobile puede decirse que la plantilla sufre un acelerón importante en cuanto a su composición de manera sustancial, pero no definitiva. Más adelante ya se verá, pero la prioridad en este punto es un lateral derecho y la opción deseada se ha complicado hasta el punto de que Monchi ha activado la segunda alternativa tras las complicaciones que han surgido en las negociaciones con la Juventus por Mauricio Isla. La Copa América que ha completado el chileno ha puesto las orejas tiesas a los dirigentes juventinos, que no se conforman ahora con lo que hace un mes podían aceptar por el jugador. "Poco más podemos decir de Isla. Teníamos un interés grande en el futbolista, pero su buena actuación ha desbordado su precio y la idea que tiene la Juve. A día de hoy trabajamos en otras opciones también interesantes. Espero que pueda estar en breve por aquí". Esa opción, o esas opciones, está siendo tratada en la planta noble del Sánchez-Pizjuán y ahora mismo es el brasileño Mariano Ferreira, experimentado lateral del Girondins de Burdeos que compartió vestuario con Tremoulinas y que viene a ilustrar la fe ciega que la dirección deportiva tiene en el mercado francés. Tiene 29 años, acaba contrato en 2016 y la prensa gala ya se hacía eco este lunes del interés del Sevilla junto a otros equipos de la Ligue 1, como el Mónaco, un duro competidor si se decide a pujar junto al Sevilla por el jugador. Mariano es un lateral muy ofensivo y con una gran aceleración que fue elegido en 2010 mejor lateral del campeonato brasileño, que abandonó con la camiseta de Fluminense para recalar en Burdeos. En Francia ha completado campañas de gran regularidad, con más de 30 partidos por temporada y con prestaciones como las que pide Emery a los laterales, una gran proyección y facilidad para el juego combinativo. Mariano anotó dos goles la pasada campaña y dio tres asistencias.
El brasileño es el primer objetivo y las gestiones se están llevando a cabo. El Sevilla, además, juega con la ventaja de que le queda sólo un año de contrato y, de momento, se ha negado a aceptar la oferta de renovación que le ha hecho el Girondins.
Su precio, unos 4,5 millones de euros, significaría una inversión menor a la de Isla, aunque el preferido sigue siendo el chileno y no se puede descartar que el Sevilla avance en la negociación de Mariano o algún otro (hay otra opción que también gusta a Emery), pero sin ejecutar hasta ver si la Juventus se baja del burro cuando el futbolista tenga que volver de las vacaciones a incorporarse y sea un problema al necesitar hueco en la plantilla.
De momento, quien sale beneficiado en pretemporada es Coke al verse sin competidor y también el joven David Carmona, que va a tener la ocasión de mostrarse en La Manga ante el entrenador. El cordobés posee un buen físico y es muy dinámico en ataque, aunque necesita aprender en élite.
Mientras, en el asunto del delantero que en teoría suple a Iago Aspas los tiempos son otros. Monchi descartó a Ben Yedder porque "está aquí la opción A, que es Immobile", pero la idea con ese puesto es ver la evolución de la plantilla (también están Juan Muñoz y Carlos) y ver qué pide Emery. Igual que con otras demarcaciones, para las que hay tiempo de ver si hace falta apuntalar. La ventaja de haber hecho los deberes con tiempo.
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