La caída del Sevilla Atlético

El Sevilla Atlético volvió a decepcionar en casa al caer derrotado por la mínima ante el Linense en un partido en el que los de Tejada pagaron muy caro los errores propios. De este modo, el filial se quedó sin puntuar por tercera jornada consecutiva, y además son ya cuatro los partidos seguidos sin ver portería, siendo la falta de gol una de las causas principales de que los nervionenses no terminen de alejarse de la zona de descenso.

Rafael Escobar, preparador de la Balona, demostró tener muy estudiado al segundo equipo del Sevilla. Y eso que la pareja de atacantes era de estreno con el debut del utrerano Juan Muñoz, que estuvo escoltado por Carlos Fernández. Con un dibujo muy marcado, los albinegros adelantaron su defensa sin dejar de tener controlado a su rival. Posicionalmente, quizá fue el equipo de La Línea de la Concepción el que más controló el juego, pero a la hora de la verdad, la mayor verticalidad sevillista generó más sensación de peligro.

No obstante, cuando se destapó el tarro de las ocasiones, fue el equipo campogribraltareño el que más inquietó. Casi alcanzado el ecuador de la primera parte, Óscar tuvo una clara ocasión que deshizo Soria, y poco después le tocó a Copi, que disparó mal tras cazar un rechazo de la defensa y permitió al cancerbero del Sevilla Atlético evitar el 0-1 gracias a una sensacional parada. Un buen centro desde la izquierda al que no llegó Jony por muy poco, fue lo más parecido a un acercamiento sevillista, en una primera parte en la que el filial no terminó de encontrarse en ataque.

También le costó, eso sí, en la segunda parte, con la diferencia de que ya no pudo aguantar atrás y acabó cediendo el 0-1. Fue a los ocho minutos de la reanudación, cuando Ramiro cazó un pase horizontal de Martínez en defensa y se plantó solo para batir con tranquilidad a David Soria. Los visitantes habían hecho lo más difícil, y un equipo con ese oficio vendería muy cara su ventaja. Y aunque a los sevillistas les costó mucho levantarse del mazazo, a los 70 minutos llegó una ocasión inmejorable para empatar. Derribo claro de Mateo dentro del área sobre Carlos Fernández. Y aunque quizás el meta debió ver la roja y no la amarilla, el colegiado no dudó en señalar la pena máxima.

Con Carlos atendido en la banda, el debutante Juan no dudó en tomar la responsabilidad, pero Mateo le adivinó la intención y paró el lanzamiento. Una ocasión de oro que habría metido al filial en el partido, pero a partir de ahí ya fue muy difícil. Y eso que Ramón Tejada sacó a todos los recambios que tenía en ataque e hizo debutar al linense Juanje. Ni los últimos compases sirvieron para optar al empate, por lo que el equipo se quedó con la misma puntuación, y a la espera de que se dispute el resto de la jornada para ver cómo queda en la clasificación.