Gameiro ya está aquí

Era quizás el nombre más esperado por los sevillistas en este mercado de fichajes. Kevin Gameiro aterrizó este martes en Sevilla para firmar este miércoles como nuevo futbolista de la entidad nervionense de cara a las próximas cinco temporadas, tras un desembolso de unos 8 millones de euros, que puden superar los 9 con variables.

Uno de los viejos deseos de Monchi, que ya intentó fichar a este futbolista hace dos temporadas cuando despuntó como efectivo goleador en las filas del modesto Lorient, llega de esta forma para reforzar la delantera de Unai Emery con velocidad, potencia y una magistral capacidad para el desmarque y la definición. Deseo concedido: el Sevilla se hace con uno de los atacantes más deseados de Europa, por el que también suspiraba el Valencia, y que será competencia directa para Carlos Bacca y Rusescu. El club hispalense, que aún no ha hecho oficial el traspaso, presentará al futbolista mañana, una vez queden resueltos hoy todos los asuntos de documentación.

El futbolista francés se encontraba en Estocolmo (Suecia) con el París Saint-Germain en una gira que el cuadro parisino inició el lunes y que contaba con el ariete pese a que Laurent Blanc, su propio entrenador, se había resignado ya a la marcha del goleador. Un vuelo con destino a Sevilla era solamente cuestión de tiempo.

Con el acuerdo con el futbolista resuelto desde hacía varios días, sólo faltaba la predisposición final del PSG a dejar marchar al jugador a su destino preferido. Los ocho millones más incentivos puestos sobre la mesa han satisfecho finalmente los deseos del cuadro galo, que de esta forma encuentra acomodo a uno de sus atacantes, zona en la que tiene demasiados efectivos tras la llegada de Cavani.

Gameiro pasó por las filas del Estrasburgo, equipo en el que se rompió los ligamentos cruzados, antes de brillar con fuerza en el Lorient, club en el que anotó 56 goles en sus tres temporadas en la Ligue 1. Fue entonces cuando algunos clubes trataron de hacerse con sus servicios incluso a mediados de esa exitosa temporada. Fue finalmente el París Saint-Germain el que se hizo con el jugador en una apuesta que incrementaba las opciones del inicio de un proyecto ilusionante. Sin embargo, la dura competencia nunca contribuyó a que Gameiro enseñara su mejor versión con Ancelotti en este último curso liguero.

Sus números dejan claro que se trata de un goleador, pero aporta mucho al juego gracias a su capacidad para asociarse con facilidad con sus compañeros y a su capacidad para desmarcarse y abrir espacios a otros.

Con origen portugués por su abuelo paterno, Gameiro estuvo cerca de jugar con la selección de Portugal cuando en el año 2009 Carlos Queiroz, entonces ávido de encontrar una pieza para su delantera, lo llamó para convencerlo de jugar con el conjunto luso. Pero la llamada de Francia posteriormente lo hizo decidirse por representar al combinado de los Bleus, con el que también había disputado encuentros de categorías inferiores.

Precisamente fue Laurent Blanc el que lo hizo debutar con el primer equipo de Francia, aunque después lo dejaría fuera de la lista para la Eurocopa de 2012 pese a disputar encuentros de la fase de clasificación. Quizás esa decisión debilitó una relación que encontró este verano otro lazo de desunión cuando el propio Blanc llegó al París Saint-Germain. Su mirada siempre estuvo dirigida a satisfacer el que había sido un viejo sueño del Sevilla y el jugador no se despegó de su intención hasta el día de hoy, cuando al fin firmará con su sonrisa más esperada.