Un auténtico todoterreno del fútbol

No hay frase más correcta que aquella que dice que el saber no ocupa lugar, y Gabriel Reyes es un claro ejemplo de ello. Este erudito del fútbol, que atesora en su extenso currículum el haber sido entrenador y preparador físico de múltiples equipos como el Écija, en la actualidad, Mérida, Ceuta o Sporting Mahonés, se define como "un hombre que no puede estarse quieto".

Ejemplo de ello es que este voraz técnico ha realizado varios estudios sobre preparación física, y fruto de ellos publicó libros como El corazón del torero, premiado por la Junta de Andalucía, o Fuerza específica de alto rendimiento deportivo aplicada al fútbol. Son libros escritos tras largos años de trabajo e investigación sobre el estudio del cuerpo y su complejo funcionamiento.

Gabriel es todo un luchador que siempre ha tenido claro su futuro y que se ha esforzado por llegar adonde está a día de hoy. "A mí nadie me ha dado nada, no soy cascarón de huevo. Lo que soy es un enamorado del fútbol, y ése ha sido mi incentivo para llegar aquí", afirma orgulloso y dando otra muestra de determinación.

Tras tantos años de dedicación al deporte son miles las experiencias que este inquieto hombre de fútbol trae sobre sus espaldas, las cuales recuerda con pelos y señales. "Mi etapa como segundo entrenador y preparador físico del Sporting Mahonés fue muy bonita. Cogí a un equipo con una media de 21 años y lo metimos en liguilla de ascenso. Fue algo increíble".

Pero sin duda, Gabriel destaca el gran cambio que vivió en el Girona, cuando cambió el banquillo por la grada. "Fue un antes y un después. Porque de estar entrenando a convertirte en analista del rival contrario hay un paso importante. Para saltar a una secretaría técnica hay que estar muy bien", señala el técnico, que también participó en la creación de una infraestructura de cantera en Mérida, algo que cogió con mucho cariño, "una experiencia muy enriquecedora".

Este todoterreno ha desarrollado toda su carrera en España, donde este año comienza una nueva aventura en el Écija, pero le gustaría poder ejercer su dedicación por el fútbol en el extranjero. Ahí señala a países como Inglaterra o Alemania como destinos favoritos. Sin duda sería un interesante fichaje para el club que lo contratase, ya que ideas no le faltan. Gabriel tiene un proyecto entre manos con el Betis, al que le presentó un elaborado programa que aún no puede desvelar. Ha recibido la promesa de que cuando el club verdiblanco disponga de una mejor situación económica le dará vía libre. Toda una caja de sorpresas este enamorado del balompié que, gracias a su perfeccionismo y un hambre voraz por ampliar su conocimiento, tiene un currículum que ya quisieran muchos.